No quiero hacer literatura de esto. Sólo contar que estoy bien, al igual que mis seres queridos y que esto me tiene contento. Sin embargo, a la vez estoy triste, claro. La tragedia ha sido grande y hasta ahora se hablan de más de 700 víctimas en todo Chile, con posibilidad de llegar a las 1000. Ha sido un susto grande y por esas cosas raras de la vida, lo pasé rodeado de la gente que más quiero. No sé si es más terrible el terremoto o lo deficiente de las comunicaciones que, como cada fecha en que se tornan realmente importantes, fueron nulas durante horas.
Valparaíso se ve igual de destruido que siempre, un poco más de escombros en el suelo nada más. Esta casa desde donde escribo se movió como jalea, al igual que el barrio entero. Creo que soy un tipo con suerte.
En las noticias se ha hablado todo el día de terremoto, tsunamis falsos que terminaron siendo verídicos, maremotos, catástrofe y aquel nuevo adjetivo que han descubierto los periodistas que es lo "dantesco". Ahora ya han aparecido otras como lumpen, saqueos, crimen organizado y han hecho un efusivo llamado, al igual que la derecha, al estado de excepción y al toque de queda, ya se confirmó que así será en las zonas más dañadas. Perdónenme mis amigos progres, pero creo que del toque de queda a la sublevación, al gatillo fácil y a la matanza hay sólo un paso.
Han sido horas tristes, de psicosis mediática. No se puede hacer otra cosa que conectarse a la tv y a internet, si los teléfonos no funcionan no se puede hacer otra cosa. Han sido horas fuertes y de vivir aquello a lo que siempre nos han preparado y sin embargo nunca hemos estado listos.
Repito: acá estamos bien, con la gente que quiero y la familia que amo. Espero que todos esten igual.
Valparaíso se ve igual de destruido que siempre, un poco más de escombros en el suelo nada más. Esta casa desde donde escribo se movió como jalea, al igual que el barrio entero. Creo que soy un tipo con suerte.
En las noticias se ha hablado todo el día de terremoto, tsunamis falsos que terminaron siendo verídicos, maremotos, catástrofe y aquel nuevo adjetivo que han descubierto los periodistas que es lo "dantesco". Ahora ya han aparecido otras como lumpen, saqueos, crimen organizado y han hecho un efusivo llamado, al igual que la derecha, al estado de excepción y al toque de queda, ya se confirmó que así será en las zonas más dañadas. Perdónenme mis amigos progres, pero creo que del toque de queda a la sublevación, al gatillo fácil y a la matanza hay sólo un paso.
Han sido horas tristes, de psicosis mediática. No se puede hacer otra cosa que conectarse a la tv y a internet, si los teléfonos no funcionan no se puede hacer otra cosa. Han sido horas fuertes y de vivir aquello a lo que siempre nos han preparado y sin embargo nunca hemos estado listos.
Repito: acá estamos bien, con la gente que quiero y la familia que amo. Espero que todos esten igual.
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