
Se colaron un par de estos vejetes a la actividad también, querían seguir con su performance, tuvieron que involucrarse los pacos y los guardias para que terminara la función: la funa a Mellado.
Debo reconocer que quedé en shock y que incluso a la hora de escribir estas palabras acarreo cierta impotencia. Más que nada porque aún no creo el nivel de barbarie de esta región y de aquellos que se hacen llamar la patota culturalosa.
Recuerdo ciertas imágenes del asunto: 1) A Álvaro Bisama comentando una semana antes sobre el artículo que Mellado pretendía publicar en el The Clinic y sobre las consecuencias nefastas que le iba a acarrear, mi primera impresión y comentario mental fue sobre lo exagerado que puede llegar a ser Bisama algunas veces. Ahora entiendo que ni él se imagino tanto, a pesar de que tiene cierta experiencia con situaciones como ésta. 2) Cuatro vejetes en la puerta del Consejo de la Cultura con los brazos cruzados y uno de ellos con el The Clinic en la mano, a su lado un chascón montando una cámara de televisión, me dio mala espina la cosa, de hecho esperé ver a algún conocido para recién decidirme a entrar. 3) A Felipe Motalva algo preocupado y contándome que los tipos de Editorial Fuga le comentaron que algunos pretendían funarse a Marcelo Mellado, pero que no podían dar más detalles sobre el tema. 4) A Eric Carvajal, el otro preformista de la noche, comentando lo mismo, con cierta satisfacción en la mirada. 5) Lo siguiente fue el comentario a murmullos pero generalizado: “le pegaron al Mellado”.
Tengo entendido que todo se venía planeando en los últimos días, que la farandulité literaria se había puesto de acuerdo, se habían organizado, habían hecho correr una cadena de mails, y habían dado aviso a los medios de esta ciudad, la idea era, por un lado darle una lección a este outsider que es Mellado, taparle la boca e incluso llegar al concepto protofascista de querer declararlo persona non grata a nombre de esa patria literaria que son los escritores, que tanto bien han hecho por la cultura de Valparaíso; pero por otro lado esta articulación mafiosa lleva a los medios para provocar una especie de humillación pública, como en los tiempos bíblicos, poniendo una cruz y un ejemplo por si futuros pelotudos se atreven a meterse con estos literatos camorreros, matones, que actúan como patos malos, y más encima cinco contra uno en un escenario en donde no había posibilidad de defensa ni siquiera siendo Mellado un experto en Full Contact.
No puede haber sido más simbólico el lugar: la institucionalidad cultural misma, el Consejo de la Cultura, ubicado a cuadras del Playa, bar en donde se originó todo esto, cuando a Marcelo Mellado le robaron dentro de una tertulia poética. Pero por sobre todo porque eso es nuestra cultura porteña: vacas sagradas y capos de mafia o líderes narco.
Lo otro que me causa una rabia descomunal es el silencio, la complicidad: desde los más pendejos como la editorial Fuga, quizás por su cercanía estética con esa mala poesía y bohemia barata, hasta los mismos agresores, todos sub 60. Como también el hecho de que todo esto salió en los medios, que obviamente no cubrieron nuestro evento, ni siquiera nos nombraron, sino que fueron a cubrir la violencia, el linchamiento, el escarmiento público y después se retiraron, como viejas cahuineras. Tampoco deja de provocarme ciertas dudas el hecho de que ninguna nota se refiera específicamente ni a Enrique Moro, ni a Darío Prieto, ni a ninguno de los involucrados. Pero ahora lo entiendo mejor: no lo hacen porque esta canallada no es de unos pocos, sino que de una escuela entera, de la literatura porteña en general.
Ya me da lo mismo la falta de respeto, pasar a llevar a simples mortales que se pasaron los ultimos meses organizando una actividad que peligró pero que salió adelante pese al atuar cobarde de ciertos personajes.
Ahora sólo queda la vergüenza.
Y repito lo que dije al comenzar estas letras: tengo rabia.
Ahora sólo queda la vergüenza.
Y repito lo que dije al comenzar estas letras: tengo rabia.
Comentarios
Se trata de una columna en el tono pesado y provocativo que acostumbra a utilizar Mellado, en la que habla sobre un hurto que sufrió en una tertulia poética y se sicosea con la teoría del complot cultural y sobre lo flaite y delincuencial que es Valparíso, yo la encontré chistosa, y lo que encontré más pulento es que Mellado está hablando de otra cosa. Justamente del chanterío.
Nada que amerite esta reacción grotesca.
Eso.
eso.
saludos y te llamo esta semana.
pd: ¿soy exagerado?. wow
Sería buenísimo poder debatir con cierta densidad, con algo de espesor, pero mejor aún, aparte de decir las cosas por su nombre, sería bueno acostumbrarse a decir los nombres: Bisama y Mellado lo hacen, así como tú en este texto, creo que por ahí va el camino: fuerte y derecho rumbo al debate, ¡y que gane el más mejol!
Sólo quiero agregar un detalle del tipo que las ofició de guaripola el día de la performance: El Sr. Enrique Moro, quien se dice gestor cultural, ligado al trabajo municipal...
Bueno, cuando el sr. Moro estuvo a cargo del Bar Emile Duboise, jamás me pagó por las presentaciones que realicé con mi banda Fuerza Chango en aquel lugar, es más: nos cobró hasta las cervezas.
Para qué veamos en qué tipo de gestión cultural cree este caballero que levantaba la mano el día jueves y gritaba: "los escritores porteños estamos muy molestos".
Sería.
Me da gusto que alguien se atreva a decir algo contra esta mal llamada "elite" poética, donde sólo caben personas que se mueven en el mismo círculo: borrachos, drogadictos y fracasados...y que además piden fiados los copetes en el cinzano...QUÉ RASCAS!!!!
Y siguen demostrando lo rascas qué son con lo sucedido en el COnsejo...
Me da pena saber que todavía hay gente que cree que por beber vino son los dioses del Olimpo...HEY!!! LA ANTIGÜEDAD CLÁSICA YA PASÓ!!!
Bajen de la nube...quizás puedan llegar a ser alguien en la vida...aunque están tan viejos que ya no hay lugar para ustedes...
Sólo que yo ya no soy muy pendejo, pero en fin. Es una lástima tener que utilizar el esfuerzo de estos tipos de los huevos para sentirse mejor uno en comparación, pero bueno, gracias a ellos por ser chantas y hacernos sentir mejor. Qué ridículo todo esto. La provincia caricaturiza todo, como dijo cierto crítico. Vente a Stgo. Ah, pero Stgo tb es provincia. En fin.
Saludos.
Al parecer está absolutamente confirmado: todos exculpan al señor Mellado de toda responsabilidad, encuentran su columna graciosa, insisten en sumarse a una cuadrilla de insultos contra la literatura porteña. Señores: ustedes no conocen la literatura porteña. El señor Mellado tampoco. La violencia física de la estupidez realizada por un grupo de gente en el Consejo está siendo absolutamente equiparada por la violencia verbal de ustedes, señores anónimos, del señor crítico Hidalgo y del señor Bisama, que por último tienen los cojones para poner sus nombres, y que se dan el trabajo de cubrir la brutal irresponsabilidad de Mellado. Mellado, en su crónica, está insultando. No hay doble lectura. No es un "chiste". No me van a tratar de convencer a mí de otra cosa.
Los poetas de valparaíso son unos chantas, luego de Martínez y Zurita no han hecho absolutamente nada por la poesía.
for Mel O’Shit, that old friend of ours
Mr. O’Shit went to tavern,
and what happened was so funny:
they stole a little bag from him,
but they didn’t steal the money!
Quite a big big book it was,
everyone will sure agree,
and with such a little bag,
that is magic hard to see;
Then O’Shit went just a-crying,
desolated by the valley,
and he told he was just dying,
like an ugly crazy nunny;
Everyone said to each other,
“what a brave hero was born”,
but O’Shit just didn’t bother,
blowin’ in St. Martin’s horn;
And he said with voice of sorrow,
“I just came from there, outside”,
and everyone then would answer,
“that’s the place where you should hide”!
But it’s sure he was a master
in some sacred form of art:
defecating like a thunder
everywhere and everyone.
His own friends had learnt to suffer
this O’Shitty discipline,
but he said “sorry, my brothers”
like a petty beauty queen.
And he paid them with his friendship,
taking money from a bag
that some man from Mount o’ Sinners
gave him with a friendly heart,
And he laughed at Mount o’Sinners,
and at all the hills and lands,
dancing everywhere beshited,
and with him came all his lads,
Which one night he came a-robbing
from some City No One Sees,
after seducing them throwing
a warm hill of filthy shit.
What a joyful, funny company,
with their Mussolini jargon!
that old fat man Big Sam barking,
and that spanish-speaking galgo!
Oh, O’Shit from Land of Nowhere,
what a shameful song to sing!
prepare your ass and your bowels,
for the mess you will be in.
DO YOU UNDERSTAND WHAT YOU READ, MR. O’SHIT????
Oh St. Martin, oh St. Martin,
with O’Shitty hand in hand!
Did you think your love was hidden
from the eyes of Everyone!
In your chair that’s undeserved,
you both loving with delight
each other, you spend your hours,
laughing at this Holy Land!
Making scorn of the good poets,
who hardly can build their lives,
and who work their verse with honest
wish of beauty and love of ART!
Oh St. Martin, oh St. Martin,
with O’Shitty hand in hand!
Did you think your love was hidden
from the eyes of Everyone!
Now we can know why O’Shitty
came up here to our big, bright
city to spit in the faces
of the grandeur and the light
Of two hundred years of Poetry,
and five hundred of Good Life,
you have as a wedding present
the Municipal Award!
Oh St. Martin, oh St. Martin,
with O’Shitty hand in hand!
Did you think your love was hidden
from the eyes of Everyone!
Such a passion with the “Mellies”
only you can really have,
take that mask out of your gesture,
let us see you as you are.
We could go there to your marriage,
we could cheer up with delight,
but there’s no one so hard-stomacked
to see that fat priest Big Sam.
Oh St. Martin, oh St. Martin,
with O’Shitty hand in hand!
Did you think your love was hidden
from the eyes of Everyone!
Let’s dance, let’s dance, let’s dance in the woods
our Big Dark Lord Mellie is breaking thru
Our bonfire is burning, but nobody sees
this shit-lit big fire is dark and can’t gleam
We kiss each other, arse and dick,
there’s Lucy coming –he’s waiting on knees
The vigour of Mellie will make his face shine,
his bowels will tremble with crash after crash
Our priest with big belly who’s called the Big Sam
he, dull, go, come eating the shit of our bums,
Hey, there come some poets: hide, hide and go home
they come brave, fierce, gentle: it’s dawn, it’s dawn,
Our city is now falling, it fades and it dies,
nobody could see it, and nobody can.
la huevadita ya pasó hace rato, una picantería que no daba para más. Y chao.
de verdad que eres patético, empieza a vivir una vida propia, búscate una mujer o mejor aún: dedícate a mejorar tu escritura, y no a dar el jugo que estás dando, y aparte amariconao, por la espalda y anónimo.
Me calentó la huevada pero ya me está dando risa... y pena por ti.
Pobre culiao.